“A mejor imagen, mayor poder de influencia”.
Por Irene Jara Ocampo. Consultora en Imagen Pública
Está demostrado que el 97% de un mensaje exitoso depende de nuestra apariencia personal, aun así, muchos no toman en cuenta la importancia de este detalle, descuidando su vestimenta, forma de proceder, vocabulario y postura, ocasionando que su discurso no obtenga el resultado deseado. Aquellos que piensan que una buena imagen no es necesaria en el mundo empresarial no tienen consciencia del peligro que ello constituye, ya que la creación de un perfil profesional destacado, debe atender un proceso integral que no deje fuera ninguno de los tres ejes que conforman la construcción de una imagen pública poderosa.
Apariencia:
Sí, como te ven te tratan, y eso no lo podemos cambiar nosotros. Dentro del mundo de los negocios, no hay una segunda oportunidad para dar una buena primera impresión.
Comportamiento:
Hoy más que nunca el empresario-emprendedor debe conocer las maneras correctas de conducirse mediante las habilidades sociales y dejar con esto, una huella agradable ante los demás.
Comunicación verbal (fondo) y no verbal (forma):
Nuestro negocio es hablar con las personas para poder convencer, y esto exige que nuestro lenguaje, dicción y tono de voz, sean adecuados y competitivos para poder incidir de manera efectiva.
No podemos olvidar tampoco, la forma de dirigirnos por escrito, debido a que este factor influye directamente ante las personas con quienes nos relacionamos.
Una imagen robusta y estable, se genera gracias al conjunto de mensajes orales y no orales que la persona o empresa emiten en medio de sus públicos objetivo. Muchos de los conceptos o iniciativas que fracasan lo hacen a partir de estímulos visuales que no fueron aceptables y por lo tanto no se pueden sustentar ante sus diferentes audiencias.
El éxito en los negocios se logra entonces, al proyectar una buena imagen que emita confianza y credibilidad, y esto se logra basándonos en las 3C de la imagen pública:
Claridad
Una Imagen debe ser tan clara que pueda sostenerse por sí misma, y de esa manera lo pueda entender el interlocutor.
Coherencia
Hay que conducirse siempre bien y siempre igual en todo momento y lugar.
Consistencia
La imagen debe cuidarse y atenderse constantemente con el fin de no perder nunca la reputación que tanto cuesta levantar.
El tema de la Imagen Pública, cada vez va ganando más protagonismo en el mundo de los negocios y gracias a ella, veremos aparecer nuevas oportunidades dentro de él.
Nada es más llamativo y necesario hoy en día dentro del ambiente laboral, que la presencia de una persona decidida, tenaz y capaz de confiar en sus habilidades para emprender y cerrar negocios.
La primera impresión siempre cuenta, y debemos aprender a usarla para lograr los diferentes objetivos profesionales que nos hemos planteado.
Tips para proyectar una imagen triunfadora:
Imagen física
Una apariencia correcta le dará seguridad y confianza dentro del mundo social y laboral. Conozca el tipo de ropa y colores que van mejor con su cuerpo y personalidad.
Imagen profesional
Es la imagen que emite su servicio o producto. Son las reglas de protocolo que se siguen en el mundo de los negocios y hasta la forma en que se manejan las situaciones de crisis. La puntualidad, saber hacer uso del tiempo y las agendas de reuniones, son imprescindibles para darle una visibilidad seria y competitiva.
Protocolo social y corporativo
Conozca la etiqueta en la mesa, hoy los negocios se cierran en actividades sociales y restaurantes.
Imagen verbal y no verbal
Son las expresiones verbales y escritas que deben ser congruentes con el mensaje que su imagen desea transmitir.
Haga buen uso del vocabulario, estudie su tono de voz, cuide su lenguaje corporal, ademanes y gestos. Sonría de manera franca y sincera. Aprenda a saludar correctamente y a caminar con la cabeza en alto y la mirada decidida.
Imagen ambiental
Mantenga siempre limpias sus oficinas, decórelas con su imagen corporativa, use sus colores y logotipo, es decir, prepare la experiencia de venta que quiera que sus clientes reciban cuando le visiten: recepción, música, temperatura, aromas y salas de juntas.
Cuide que su carro siempre esté impecable, ya que el mismo, es una extensión de usted y su marca comercial.
En estos momentos en que vivimos una economía global, ya no sólo debemos ser buenos, sino que también tenemos que parecerlo.