Si usted es de los que piensan que “así soy yo y no me importa lo que crea la gente de mí”, déjeme decirle que está cometiendo un gran error y hasta puede estar cavando su propia tumba personal, social y hasta profesional. ¿Por qué? Porque precisamente la forma en que nos perciben los demás determina nuestro éxito o fracaso en cada uno de los ambientes en los que nos desenvolvemos día con día.
Y es que, la mayoría de las personas son totalmente visuales y por lo tanto toman sus decisiones de acuerdo con lo que ven, de esta manera, es inevitable tener una Imagen ya que siempre la gente tendrá una percepción de cada uno de nosotros. Así las cosas, más nos vale moldear en forma positiva dicha apreciación.
Ahora, para lograr una buena Imagen nuestra, lo primero que debemos pensar es que ésta en todo momento debe ser coherente con lo que somos y con lo que tenemos. O sea, que no se trata nada más de aparentar, sino que realmente debemos ser, eso que decimos que somos. Por eso la importancia de conocernos bien y respetar profundamente nuestra esencia, personalidad, valores, principios, educación y manera de ser, con el fin, de que realmente nos mostremos tal cuales somos en todo momento y lugar.
Por otra parte, la Imagen es dinámica por lo que debe adecuarse a las diferentes circunstancias en las que se encuentre, es decir, ya sea que se esté disfrutando de una fiesta o en medio de una junta de trabajo, el objetivo a lograr debe ser que nunca se pierda el estilo y la compostura, y que, por más divertido que esté, no deje de ser esa persona elegante y con aplomo que nos interesa mostrar a los demás en cualquier momento social o profesional.
Otro punto a considerar es la relatividad de la Imagen, la cual nos dice que es imprescindible que, de acuerdo a las necesidades de las personas que tenemos a nuestro alrededor, debemos ponerlas en concordancia. Por ejemplo, si usted tiene un puesto ejecutivo, una jefatura o simplemente se encuentra dentro de una estructura organizacional horizontal, sus actitudes y objetivos deben ser lo que su grupo espera de usted.
Y finalmente, no podemos dar una Imagen clara y bien estructurada si no tomamos en cuenta los siguientes aspectos.
Lenguaje No verbal: Es la forma en cómo comunicamos las cosas, y es tan importante como lo que realmente decimos. Su credibilidad va a depender de saber manejar bien tanto el fondo como la forma, además que no podemos dejar por fuera que las personas tienen sentimientos, y en la medida en que no nos dirijamos adecuadamente ante ellos, se pueden sentir lastimados y de esta manera rechazar cualquiera que sea la propuesta que les estemos presentando.
Imagen Verbal: Recuerde lo que siempre digo “lo menos siempre es más”, así que entre más concreto y breve sea en sus diálogos y discursos, será mejor visto por las personas que tiene en su entorno.
Imagen Profesional: Condúzcase como si siempre lo estuviesen viendo y manéjese con los demás como le gustaría que lo traten a usted.
Imagen Ambiental: Que los espacios en donde se encuentre siempre estén ordenados y limpios ya sea su casa, carro u oficina. Dentro de la empresa no importa el puesto jerárquico que usted ocupe, por lo que debe cuidar visualmente de todos los elementos que van a hablar de usted cuando no se encuentre en ese lugar.